«Era una dama hermosa, mucho más joven que su marido, que en edad aventajábala como unos tres lustros»
Me encantan los vestidos, los anillos, los collares, los bolsos y los sombreros. Me hacen mucho más hermosa y quiero que todos me vean así y me quieran como a una más. No me importa todo lo que tenga que hacer para conseguir todo el dinero y las joyas que tengo, incluso si para ello tengo que estar con hombres a los que no amo o algunas veces robar.
Sé que mi marido nunca me ha valorado ni querido, pues me trata como si fuera su esclava. Siendo sincera, al menos así no me da lástima ni vergüenza vivir la vida que llevo. Sé que la única forma de conseguir mis lujos y ser feliz implica resquebrajar mi matrimonio.
(Texto de creación, realizado por las autoras)